El verano de 2015 está siendo uno de los más calurosos de los últimos años y las altas temperaturas están batiendo todos los récords. Llevamos tantos días padeciendo estos calores que los edificios también están alcanzando temperaturas por encima de lo habitual comparado con otros años para el mismo periodo. Dada esta situación, desde Api.cat queremos hacernos eco del resultado de una investigación acerca del enfriamiento de edificios mediante la colocación de plantas en la cubierta. Aquí tenéis los detalles.
Cubiertas ecológicas
Un equipo de investigadores de la Universidad Politécnica de Madrid (UPM) ha presentado recientemente los resultados de un interesante trabajo acerca de los efectos que la vegetación genera sobre el enfriamiento pasivo de los edificios. El objetivo del experimento perseguía demostrar la eficacia energética de las cubiertas verdes y ha sido desarrollado junto con la Universidad Politécnica delle Marche.
Es posible que el edificio de tu piso de Badalona ya tenga plantas en la cubierta, ya que es un práctica que se remonta unos veinte años atrás, pero sólo en los últimos tiempos ha comenzado a despertar el interés desde el punto de vista energético y medioambiental. Sin embargo, la complejidad de los fenómenos asociados con el comportamiento termo-físico de las plantas justifica que aún no se haya desarrollado un modelo de análisis que pueda fácilmente integrarse en el proceso de diseño del edifico. De hecho, en la mayoría de los países no se ha generalizado su uso, pues este no ha sido regulado por la legislación y no existe ningún tipo de incentivo.
Cuanta más vegetación, menos calor
Los resultados de la investigación de la UPM han alcanzado las expectativas fijadas. El equipo de expertos se había marcado tres objetivos principales en la consecución de este proyecto, y todos han sido satisfechos. En primer lugar, pretendían analizar el impacto de la densidad de la vegetación en la eficiencia energética de una cubierta situada en un clima mediterráneo costero. También, se buscó desarrollar un modelo numérico simplificado que permitiera calcular los valores de resistencia térmica equivalente de plantas. Y, por último, se pretendió validar el modelo numérico utilizando datos experimentales.
A grandes rasgos, se puede decir que los resultados de la investigación confirman que cuando la densidad es elevada, el calor entrante en el edificio es de un 60% inferior al calor que entra cuando no hay vegetación. Además, se ha constatado que una cubierta con elevada densidad de vegetación actúa como refrigeración pasiva. De hecho, la energía que sale del edificio a través de ésta en verano supera en un nueve por ciento la energía que entra durante tal periodo.
Por último, es importante remarcar que la investigación demuestra que el modelo numérico tiene un buen grado de aproximación, con un error de entre el 5% y el 7%. Esto significa que es posible utilizar este modelo para estudiar en qué medida las cubiertas verdes podrían representar un ahorro energético para los edificios.
Sin duda, las cubiertas verdes podrían representar una respuesta ecológica a la demanda energética de los edificios.
¿Qué te parece esta iniciativa? ¿Crees que podría llegar a aplicarse de forma generalizada? Cuéntanos tu opinión en este post.
Foto: Pinterest
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1 comment
Me parece una buena iniciativa, con el único inconveniente de los costes de mantenimiento, ya que corremos el riesgo de que el edificio parezca una obra post apocalíptica o que los “bichitos” nos arruinen el plan. Me parece, en términos generales, una buena opción a valorar!