La escasez de oferta de vivienda que sufre Barcelona, pero sobretodo, la burbuja que está viviendo el mercado del alquiler, se ha descrito como una ‘emergencia habitacional’. Exagerado o no, la cuestión es que al Ayuntamiento le preocupa y lo combate impulsando varias medidas, entre ellas, la construcción de viviendas cooperativas. Te contamos cómo funcionarán en las noticias inmobiliarias de Api.cat
¿Cómo funcionan las viviendas cooperativas?
En Barcelona falta vivienda, pero especialmente viviendas de alquiler a un precio razonable. Por eso, el Ayuntamiento impulsa nuevas formas de acceso, que no son ni el alquiler, ni la propiedad, ni la vivienda protegida tal y cómo la conocíamos hasta ahora. Se trata de las viviendas cooperativas, una fórmula que impide la especulación, garantiza la estabilidad de los usuarios y fomenta la gestión comunitaria de los inmuebles.
Con este modelo, la propiedad de los inmuebles corresponde a una cooperativa para que no se pueda especular con ellos. Y no existen propietarios, sino socios que viven con un régimen parecido al alquiler indefinido, pero a un precio mucho más asequible y con una gestión de los espacios comunes mucho más colaborativa.
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¿Quién y dónde se construirán?
Para hacer este proyecto realidad, el consistorio ha sacado a concurso público 7 solares municipales para que cooperativas y/o promotoras sociales de vivienda puedan optar a la construcción de las viviendas cooperativas en régimen de cesión de uso. Es decir, la propiedad del suelo nunca dejará de ser pública y se ofrecerá en derecho de superficie por un periodo de 75 años. Se prevé que el potencial de edificación de los siete solares llegue a las 133 viviendas.
Las bases del concurso ya se han publicado y las empresas interesadas tienen hasta el 9 de febrero de 2017 para presentar sus propuestas. En ella, deberán incluir una memoria donde se describan los aspectos arquitectónicos, económicos y medioambientales del futuro inmueble, además de prever la creación de espacios comunes, huertos o jardines que justifiquen la rentabilidad social de la propuesta.