Ya hace algunas décadas que Internet vino a nuestras vidas para quedarse y lo hizo con tanta fuerza que, hoy por hoy, la mayoría de nosotros no sería capaz de concebir su trabajo o los ratos de ocio sin conectarse a la red de redes. Ahora bien, aunque la novedad ya ha pasado, nunca dejan de surgir nuevas ideas para aplicar en la vida cotidiana. En las noticias inmobiliarias traemos en esta ocasión una de las innovaciones más recientes que relacionan Internet con la vivienda. Es lo que se conoce como Internet de las cosas (Internet of Things).
¿En qué consiste?
Aunque a simple vista pueda parecer un concepto algo abstracto, el término Internet de las cosas ya está bastante extendido entre la sociedad y no son pocos los que disponen en su hogar de objetos cotidianos conectados a través de la red. La idea es que los objetos de uso cotidiano se vuelvan interactivos.
Ahora bien, ¿cómo funciona? A grandes rasgos, se podría decir la clave está en que cada uno de los objetos conectados a Internet tiene una IP específica mediante la que puede ser accedido pare recibir instrucciones. Además, puede contactar con un servidor externo y enviar los datos que recoja.
Internet de las cosas en casa
A pesar de que este tipo de tecnología todavía es algo incipiente, ya se han dado los primeros pasos. Así que, si quieres controlar de forma remota la limpieza, la luz o la calefacción de tu piso de Barcelona, ya puedes hacerlo sin problema.
De modo que desde nuestro móvil o tablet podemos encender o apagar la calefacción, las luces o el horno, por ejemplo. Con un sencillo módulo Wi-Fi –o una SIM como la del móvil–, casi cualquier dispositivo electrónico se puede conectar a Internet y una app instalada en el móvil puede convertirlo en un sistema de gestión remoto del elemento en cuestión.
Veamos algunos ejemplos más de cómo la tecnología nos puede hacer la vida un poco más cómoda. Desde cualquier lugar y en cualquier momento podemos poner en funcionamiento o desactivar la nevera, la lavadora o el microondas. Lo cual, en determinadas situaciones puede ser muy útil. Además, en el caso concreto de la nevera, esta puede comunicarse directamente con el servicio técnico si se avería o si detecta alguna pieza que necesite ser sustituida. También es posible poner en comunicación dos electrodomésticos. Por ejemplo, coordinar la lavadora y la secadora para que esta se prepare cuando la lavadora esté próxima a terminar el programa de lavado.
Ciudades “amables”
Esta revolución tecnológica no solo afectará a los hogares, también se extenderá a las calles hasta alcanzar ciudades completas. Son las smartcities. Si quieres saber más acerca de este concepto, puedes encontrar información en nuestro blog.
¿Ya ha entrado el Internet de las cosas a tu casa? Cuéntanos cómo lo ha hecho.