Cuando somos jóvenes, lo damos todo por vivir en pleno centro de la ciudad: podemos ir andando a todos lados, el bullicio no nos importa y tener los bares a un paso es nuestra debilidad. Pero conforme pasan los años, nuestras prioridades ya no son las mismas. Tal vez buscamos más tranquilidad, unas buenas vistas o alejarnos un poco del ajetreo que rodea a cualquier ciudad grande. Sin embargo, seguramente nuestro lugar de trabajo siga estando en Barcelona, muchos de nuestros amigos vivan todavía allí y, por qué no, nos gusta pasar tiempo en la Ciudad Condal. Por eso, a la hora de escoger entre las mejores ciudades de Cataluña para vivir, es importante que esté bien conectada con Barcelona. Así, tendremos lo mejor de los dos mundos. ¿Por qué renunciar a algo?
Además, al vivir a las afueras de Barcelona, puedes hacer escapadas más a menudo y alquilar una bonita casa de temporada como las que te ofrece Api tanto en verano, como en épocas estivales más cortas.
Seis ciudades cercanas para vivir conectados a Barcelona en coche, tren o autobús
Son muchas las ciudades que puedes elegir para empezar una nueva etapa en tu vida y que están conectadas con Barcelona a través del tren, el autobús o el coche, pero de entre todas ellas, hay cuatro que no solo están cerca de la Ciudad Condal, sino que disponen de todos los servicios necesarios para hacer vida allí (supermercados, colegios, tiendas…). ¡Vale la pena empezar la búsqueda con estas seis opciones que están, sin duda, entre las mejores ciudades de Cataluña para vivir!
Mataró: conectada a Barcelona a menos de una hora en tren
En El Maresme hay muchos pueblos donde escoger, entre el que se encuentra Mataró, la capital, con 120.000 habitantes. Está a tan solo a 47 minutos en tren y tiene todo lo que necesitas para vivir allí, incluidas unas estupendas playas y un puerto deportivo.
El Masnou: a media hora conectada con Barcelona
Es otra de las ciudades que pertenecen a la localidad de Maresme y que está a unos 30 minutos en tren de Plaza de Cataluña, aunque podemos ir en bus o coche si lo deseamos reduciendo el tiempo a apenas 20 minutos. Dispone de tiendas, empresas, colegios a la vez que numerosas opciones de ocio deportivo y espacios naturales en los que perderse en un día de vacaciones.
Sant Cugat del Vallès: la conexión de Barcelona hacia la montaña
En el Vallès Occidental está Sant Cugat. Una zona acomodada, con muchas opciones para los amantes de los barrios residenciales. Está a 25 minutos de Barcelona y cuenta con multitud de espacios para relajarse y desconectar del trabajo.
La Garriga: la tranquilidad está sólo a 50 minutos de Barcelona
Perteneciente al Vallès Oriental, La Garriga es un gran municipio, perfecto tanto para disfrutar de tranquilas zonas residenciales como de otras más animadas, ya que dispone de centros comerciales. Está a 48 minutos de la capital.
Casteldefells: lujo, playas y tranquilidad perfectamente conectada con Barcelona
En el Baix Llobregàt se encuentra Casteldefells, que está muy bien comunicada con Barcelona y a tan solo media hora. Esta localidad es famosa porque muchos de los futbolistas del Barça tienen allí sus mansiones. ¡Pero no hace falta ser millonario para vivir allí! Hay opciones para todos los bolsillos.
Sitges: cuando ni te hace falta estar conectado con Barcelona (pero lo estás)
A 43 minutos de la Ciudad Condal, Sitges es uno de los pueblos más populares de Cataluña. Tanto que hasta tiene su propio festival fantástico de cine. ¡Imposible aburrirse aquí! Por supuesto, y al igual que el resto de lugares de los que hablamos, tiene colegios, tiendas, espacios verdes y todo lo necesario para empezar una nueva y apasionante vida en ella.
Beneficios de vivir a las afueras pero con buena conexión con Barcelona
Son muchas las ventajas que tiene comprar un piso en un pueblo cercano a Barcelona. Además de poder seguir en contacto con la ciudad bien sea por trabajo o por no perder el contacto con nuestros familiares y amigos, tenemos cuatro beneficios más:
Los precios son más económicos que vivir en Barcelona
Vivir en una bonita ciudad costera no cuesta lo mismo que en pleno centro de Barcelona. Si te decantas por la primera de las opciones, podrás invertir menos en tu nuevo piso y, los gastos sobrantes, destinarlos al diseño y a la compra del mobiliario. Además, al igual que los pisos son más económicos, el día a día también lo es.
Pisos más grandes y mejor equipados
En comparación con las opciones de compra que hay en Barcelona, los pisos disponibles en las afueras suelen ser, además de más económicos, más grandes. ¡Ideal si estás pensando en formar una familia o celebrar reuniones familiares a lo grande!
Es más relajante vivir conectado a Barcelona que en la propia Barcelona
Sabemos que toda gran ciudad, incluida Barcelona, es bulliciosa. Lo bueno de vivir en las afueras es que te da la oportunidad de descansar de esto cuando vuelves del trabajo y, a la vez, desconectar de tu entorno laboral, que nunca viene mal, ¿verdad?
Mayor calidad de vida a las afueras de Barcelona
Por lo general, la relación con los vecinos es mucho más cercana. Existe una comunidad que tal vez en Barcelona no encuentres, debido al ritmo de vida que se lleva. En los pueblos, las tiendas, los vecinos y relación con ellos son más fluidas y estrechas.
Nuestras recomendaciones: factores a tener en cuenta al decidir si vivir en Barcelona o conectado a Barcelona
Seguramente tienes muchas dudas a la hora de escoger la que será tu vivienda definitiva, por eso, lo mejor es buscar asesoramiento. ¡No subestimes lo que puede hacer por ti un buen agente inmobiliario! Y en Api, estamos deseando ayudarte para que encuentres lo que buscas. Porque hay tantas opciones como pueblos en Cataluña.
Por último, antes de elegir la que será tu vivienda, dedica un momento a pensar bien en tu presupuesto. No solo lo que cuesta el piso o la casa, sino también los gastos adicionales como una posible reforma, si la necesita, lo que te va a costar la mudanza, lo que quieres invertir en mobiliario y los gastos de comunidad. Se trata de una planificación fundamental si no quieres llevarte un susto y que tu presupuesto suba más de la cuenta.
Además, en torno al presupuesto, también es recomendable que la hipoteca no suponga más de un 40% de los ingresos mensuales del núcleo familiar. Muchas de las entidades incluso bajan esta estimación a un 30%.
Ahora, ¡tan solo queda empezar a buscar! ¿Empezamos?