De casa al trabajo y del trabajo a casa, pasando por el coche, el autobús o el metro. Las combinaciones posibles son variadas, pero lo que no cambia mucho es que la mayoría pasamos más tiempo en espacios cerrados que en el exterior. En Api.cat nos centraremos en las condiciones que debería tener nuestro hogar, en lo que a cerramientos se refiere, para reducir los riesgos que tiene para nuestra salud no contar con un buen aislamiento.
¿Qué es lo que debemos cerrar?
El objetivo es mantener el piso aislado, tanto en verano como en invierno. Y es que, lo que nos interesa es que ni el frío ni el calor salgan de casa o entren del exterior. Según los expertos, el mejor modo para conseguirlo es reforzando los puntos estratégicos por los que el aire y el calor se dispersan: paredes, techo y suelo. Existe multitud de materiales y sistemas que han ido evolucionando a lo largo de los años y se han ido adaptando tanto a las características de las viviendas como a las nuevas legislaciones al respecto.
¿Qué riesgos tiene un mal aislamiento?
Según el Instituto de Seguridad e Higiene en el Trabajo, los habitantes de las ciudades pasan entre el 58% y el 78% de su tiempo en un ambiente interior. Por ello es fundamental que la calidad de dichos ambientes sea la mejor posible.
En el caso de los domicilios particulares, como tu piso de Terrassa, es responsabilidad tuya evitar que las inclemencias meteorológicas a las que está expuesto continuamente no lleguen a percibirse en su interior. Es decir, conseguir un buen aislamiento.
Y es que, aunque no es una información muy conocida, lo cierto es que existen muchos problemas de salud cuyo origen está vinculado a un mal cerramiento del hogar. Si enumeramos uno a uno los agentes externos que se perciben en el interior de las viviendas debido a la falta de aislamiento podemos encontrar cómo en la práctica totalidad de los mismos aparece un problema de salud relacionado con el mismo.
Veamos algunos ejemplos del agente externo y los problemas de salud que provoca:
- El ruido: Problemas en el sistema nervioso e insomnio.
- Entrada de polvo: Alergias y problemas respiratorios.
- La humedad: Aparición de hongos, moho y enfermedades relacionadas con los huesos.
- Los cambios de temperatura: Insomnio y cambios de humor.
Ahorro energético
Si llevamos a cabo un buen aislamiento en casa, nos ahorraremos muchos problemas de salud, pero también podemos disfrutar de un importante ahorro energético. Y es que, un inmueble al que se le ha procurado un cerramiento completo y de calidad, registra un mejor rendimiento energético, disminuyendo la necesidad del uso de métodos adicionales de regulación de la temperatura, con el consecuente ahorro económico.
¿Crees que se presta suficiente atención a los aislamientos de los pisos? Danos tu opinión en este post.