El loft es un tipo de vivienda que desde hace mucho tiempo viene ganando adeptos. Se caracteriza por tratarse de viviendas recuperadas sin apenas divisiones que delimiten los espacios, sin más concesiones a los muros que la más estricta intimidad. Su origen lo encontramos en New York, entre los años 50 y 70, donde abundaba el suelo industrial, con precios bajos y espacios amplios. Pero aquí y ahora no es el caso, aunque lo que sí está disponible son muchos locales. Si quieres comprar un loft en Girona, puedes escoger un local convertido en loft, o hacerlo tú mismo. Vamos a contarte cómo convertir un local en loft.
Al tratarse de un local es evidente que no dispondrá de las instalaciones adecuadas a nuestro loft en lo tocante a electricidad y fontanería. Para que las nuevas tuberías y conducciones no salten a la vista tienes varias soluciones: la primera, la más cara, empotrar o soterrar. La segunda, más económica, derivar la mayoría a un falso techo, pero nos costará algo de altura, pondera si te compensa. La tercera, más simple y acorde con la filosofía del loft, es dejarlas vistas. Esto no cuadra con muchos estilos de decoración, pero si escoges alguno poco formal, como el rústico o el industrial, incluso puede favorecer la estética final.
Aunque la idea inicial de loft pasa por una gran superficie, también podemos adaptar un pequeño local. La mayoría tienen una altura superior a la habitual en los pisos, y en muchos casos ya disponen de un altillo. Si no es nuestro caso podemos hacerlo nosotros fácilmente, simplemente habilitando un suelo para acoger el dormitorio, conseguiremos privacidad y más espacio. El acceso, a gusto del consumidor: desde escaleras apoyadas en la pared a simplemente apoyadas en el suelo del altillo, pasando por las de caracol, con barandillas o sin ellas para los más atrevidos.
En un loft prima, como hemos dicho, un ambiente diáfano. Pero tu local puede ser estrecho y largo, como tantos hay: nos será útil entonces, por el tema circulación de aire y calefacción, recurrir a algunos trucos. Puedes poner alguna división de cristal, que ópticamente no pesará pero ayudará crear un circuito de ventilación, que necesita de barreras para ser eficaz. Una chimenea redonda en el centro ayudará a un living original en un ambiente frío. Si por el contrario, el local es muy caluroso, en lugar de una chimenea una zona de jardín con una fuente ayudará a refrescar el ambiente.
La luz, otro ingrediente muy típico del loft, puede ser un inconveniente en nuestro local, puesto que a pie de calle la inseguridad ciudadana actual no hace muy atractivo el tener grandes cristaleras, por opacas y de seguridad que sean. Además, a menudo la única fuente de luz natural de un local es la fachada o parte de ella. Una solución a esto puede ser el hormigón translúcido, puedes saber más sobre él en nuestro post Luz y color en tu casa con pavés. También se pueden crear falsos ventanales, iluminados con leds de luz de día.
Los lofts causan furor entre las celebridades, tu también puedes conseguir el tuyo, ¡anímate! Hay que obtener la cédula de habitabilidad, busca un Api para que te asesore en la búsqueda del local y en los trámites, lo encontrarás en Api.cat.
Pero a lo mejor lo estás viendo desde el punto de vista del propietario de un local vacío. Plantéate si tendría más salida tu local como loft de alquiler en Barcelona. ¿Te gusta la idea?
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