Seguro que conoces las jornadas de puertas abiertas que hacen instituciones, colegios o equipamientos para darse a conocer. ¿Por qué no hacerlas también en casas que estén en venta? El Open House es una modalidad de márqueting inmobiliario que cada vez se utiliza en más países. ¿Sabes cómo funciona? En Api.cat te lo explicamos.
Ventajas e inconvenientes:
- Para los compradores: ese día pueden pasear libremente por la casa de Sant Cugat que les interesa, sin tiempo prefijado ni presiones. No recibirán una atención tan personalizada, pero siempre tienen el vendedor allí para preguntar lo que necesiten.
- Para los API: pueden enseñar esa casa de Igualada de golpe a muchos posibles clientes y siempre puede haber alguno interesado. Sin embargo, en el Open House no hay filtros y es más difícil detectar a los compradores realmente potenciales y estar por ellos.
- Para el propietario: quizás se ahorre algunos días de visitas concertadas, pero durante un día deberá dejar la casa a disposición del API y los compradores.
Consejos para que funcione:
- No trates de organizar un Open House como propietario ni quieras hablar mucho con los visitantes. Deja el trabajo para los API, que saben cómo hacerlo y se encargarán de que sea un éxito.
- Piensa si la casa es adecuada: en pisos, pequeños, por ejemplo, no es muy aconsejable. Tampoco funciona igual con viviendas que llevan mucho tiempo en el mercado. Aunque puede ser un recurso, piensa que presentar novedades siempre resulta atrayente.
- Elige bien el día: mejor que sea en fin de semana, para que la gente pueda venir a verla. Ten en cuenta hacerlo en fechas en que no haya fiestas o acontecimientos en la zona que limiten los visitantes.
- Anuncia ampliamente la jornada: puedes invitar a posibles compradores que ya tengas en cartera, pero asegúrate de dar a conocer el Open House por medio de anuncios, en tu página web o a través de las redes sociales. Ya que lo organizas, mejor sacarle provecho.
- Facilita que los interesados encuentren fácilmente la casa: adjunta mapa en los anuncios, pon alguna señalización en sitios estratégicos próximos a la vivienda y asegúrate de que esta sea reconocible por medio de un cartel. En Estados Unidos, incluso ponen globos en la casa para que sea más visible.
- Asegúrate que la entrada esté despejada: trata de que sea fácil aparcar cerca de la casa. Puedes pedir un permiso municipal para ese día.
- La casa tiene que estar impecable y acogedora: se trata de seducir a los interesados, y para eso, nada mejor que una bonita casa que invite a quedarse en ella. Pon música suave de ambiente, enciende todas las luces y abre cortinas y persianas, pon algo para beber y algo de picar para los visitantes…
- Deja folletos con información de la casa y argumentos para comprarla: sus características, condiciones económicas, información de comercios, colegios y servicios cercanos etc. También puedes poner fotos de la casa para enseñar cómo luce en otros momentos del año.
- Deja claro que no se trata de una subasta: el precio es fijo o, como mucho, negociable.
- Ten clara y a mano toda la información sobre la vivienda: te la preguntarán y hay que tenerla para no perder una posible venta.
- Puede ser útil llevar un registro de visitantes para tener los datos y poder llamar luego a quien creas que puede interesarle y también por motivos de seguridad: nunca está de más.
Ya ves que requiere trabajo pero también da resultado. ¿Lo has probado ya? Cuéntanos tu opinión, dudas o experiencia.
Foto: Pinterest