Prácticamente, en todo el invierno, no has pisado la terraza de tu casa. Tan solo en un par de ocasiones y fue para limpiar el suelo de las hojas y el polvo que se había acumulado. No obstante, sabes que tu amor por este espacio se renovará en cuanto comience a hacer un poco de calor. Pero, antes de que llegue ese momento, deberás invertir algo de tiempo y preparar adecuadamente esta zona para que cumpla con todas tus expectativas.
Para empezar, hay que prestar atención al suelo. Entre nuestras preferencias destacamos dos que pensamos que pueden encantarte. La primera es instalar un césped artificial que le aporte ese toque de color que necesitas y te trasporte a otro lugar cuando estas en esta zona. La segunda pasa por instalar una tarima de madera que le confiera un aire distinguido. Sea cual sea la opción que escojas, el resultado será increíble.
En el caso de que tu terraza admita incluir mobiliario, el uso que le darás será aún mayor. El estilo que desees conferirle decantará la selección del mismo. Nosotros, generalmente, optamos por materiales como la madera y el mimbre, pero sin que esto nos lleve a renunciar al confort que necesitamos. Por ello, prestamos una gran atención y le conferimos mucha importancia a los elementos textiles que introducimos. No olvides adquirir unos cojines que te permitan acomodarte perfectamente a tus asientos e incluso, alguna manta de hilo que decore el conjunto.
No descuides la intimidad que puedes tener en este espacio. Estar en el exterior no es sinónimo de estar expuesto a los ojos de cualquier persona que esté paseando por la calle. Por este motivo, si tu terraza resulta muy visible no olvides colocar una celosía que haga efecto mampara.
Por último, atiende a las sensaciones que te genera y maximiza el efecto de relax que puedes conseguir en ella. Una forma de lograrlo, es incluyendo plantas o flores que aporten notas de color y desprenda un aroma agradable. Una planta que te puede aportar este resultado es la dama de noche.