Con la bajada de temperaturas, es posible que te ronde la cabeza la idea de aislar térmicamente tu vivienda. Lo cual es muy buena idea, ya que el frío no es la única razón para hacerlo. De hecho, expertos en estos temas aseguran que los beneficios obtenidos se refieren tanto a la salud como al consumo energético. Ahora bien, ¿qué es mejor aislar desde dentro o desde fuera? En este post de las noticias inmobiliarias de Api.cat nos centraremos en la segunda opción, en sus ventajas y en los obstáculos más habituales que nos encontramos cuando elegimos el aislamiento exterior.
Ventajas de aislar desde fuera
Si quieres proteger térmicamente y desde el exterior tu piso de Barcelona, aquí tienes algunas de las ventajas que te confirmarán lo acertado de tu decisión:
- No tendrás que convivir con las obras. Lo cual es, sin duda, una excelente razón para descartar el aislamiento interior a favor de hacerlo en la fachada. El polvo, los escombros y la presencia de los operarios durante el tiempo que duren las obras no será el motivo que impida que pongas en marcha el aislamiento.
- No perderás espacio en el interior. Dado que las obras se hacen en la fachada y la cubierta, el espacio de aislamiento se gana hacia afuera.
- El aislamiento es total. Verás cómo la inversión que supone hacer este tipo de reformas pronto será recompensada. Y es que, como ya hemos mencionado, el consumo energético disminuye notablemente y con ello, también los gastos asociados.
¿Cuáles son los obstáculos al aislar por el exterior?
Si vives en un bloque de pisos tendrás que proponer tu idea al resto de los vecinos y cruzar los dedos para que todos estén de acuerdo en llevar a cabo el aislamiento. En este punto es donde normalmente encontramos el impedimento más usual que no es otro que la oposición de alguno de los propietarios. Como consecuencia es probable que nunca se apruebe en la Junta de Propietarios y debas renunciar a tu iniciativa.
Otro de los contratiempos que te pueden surgir es que te topes con dificultades técnicas. Si es así, te sugerimos que consultéis con un profesional, quien probablemente encuentre el modo de solventar el problema.
Por otro lado, el aislamiento exterior hará que la imagen del edificio quede modificada, lo que podría suponer un problema. Para analizarlo, averiguar si realmente lo es y resolverlo, es importante ponerse en manos expertas.
En definitiva, el aislamiento térmico es una práctica cada vez más generalizada cuyos beneficios son mayores cuando lo hacemos desde exterior. Sin embargo, tanto desde fuera como desde dentro, encontraréis importantes ventajas relacionadas con el bienestar de la familia, tanto en términos de calidad de vida como económicos.
Teniendo en cuenta los comentarios que hemos mencionado en este post, ¿te parece interesante el aislamiento térmico para tu casa? Comparte tu opinión. Nos encantaría conocerla.