Si hace un poco de memoria, recordarás que en octubre del 2015 hubo una gran polémica referente a la reforma del sistema eléctrico español y a lo que se bautizó como impuesto al sol. Se trata de un Real Decreto de Autoconsumo que aprobó el gobierno con el objetivo de grabar con impuestos a aquellas personas que se conecten a la red eléctrica para generar y almacenar su propia energía.
A raíz de la polémica, las empresas de energías renovables iniciaron una batalla legal contra esta reforma. Te contamos su evolución en las noticias inmobiliarias de Api.cat

La batalla contra el llamado “impuesto al sol” sigue adelante
El 2016 ha empezado con una buena noticia para los defensores de las energías renovables: El Tribunal Supremo ha admitido a trámite el recurso contencioso-administrativo contra el real decreto de autoconsumo que presentó la Asociación de Empresas de Energías Renovables (APPA). Se trata del primer recurso contra esta norma que acepta el Tribunal, entre la veintena que han presentado otras asociaciones y organizaciones como la Asociación Nacional de Inversores en Energía Fotovoltaica (Anpier), la Unión Española Fotovoltaica (UNEF), Greenpeace o CC.OO.
Todas ellas creen que este decreto que pretende regular el autoconsumo discrimina a las tecnologías renovables en beneficio de las tecnologías fósiles y las grandes compañías eléctricas, a la vez que vulnera el principio constitucional de la libertad de empresa y contraviene las directivas europeas 2009/28/CE de fomento de las renovables y la 2009/72/CE del mercado interior de la electricidad. ¿Eres auto consumidor de energía en una vivienda en Barcelona? ¿Cómo crees que terminará?
El quid de la cuestión y los distintos puntos de vista
La polémica nace del hecho que el decreto prevé una serie de cargos añadidos para los auto consumidores que a su vez estén conectados a la red. Es decir, aquellas personas o empresas que optan por el autoconsumo, por ejemplo instalando placas solares que almacenan energía, pero que a la vez tienen contratado el suministro para las necesidades de energía que no alcancen a cubrir mediante el autoconsumo. Estos cargos son cuestionables porque el auto consumidor ya paga sus impuestos por el hecho de tener el servicio eléctrico normal contratado.
Ante esto, el gobierno del PP considera que al estar usando la red eléctrica, los auto consumidores deben pagar un impuesto extra para contribuir con los costes de mantenimiento del sistema. Algo que el Ministro Soria calificó de “peaje solidario”.
Por el contrario, las asociaciones de consumidores, las organizaciones medioambientalistas y las empresas de energías renovables consideran que la medida solo pretende retrasar la inevitable llegada de un nuevo modelo energético más respetuoso con el medio ambiente, hacia el que ya se encaminan los países más desarrollados, para el beneficio de las grandes eléctricas.
¿Y tú, qué opinas sobre el llamado impuesto al sol?
Foto: BIT Comunicació