
Cómo influye la decoración en el estado de ánimo
¿Sabías que la distribución y orientación de los muebles, los colores de los tejidos, la cantidad de luz que entra por la ventana o el tipo de suelo que pisas pueden influir en tu estado de ánimo? La decoración no sólo es un reflejo de la personalidad, también es una eficaz herramienta que podemos utilizar con el fin de crear el ambiente propicio y contribuir a que los habitantes de esa casa tengan un estado de ánimo positivo. Desde el blog de las noticias inmobiliarias de Api.cat hemos preparado un selección de algunas de las medidas que puedes tomar para redecorar y revitalizar tu hogar y de paso dibujar una sonrisa en tu cara.
¡Que entre la luz!
Comenzaremos por asegurarnos de que en tu piso de Barcelona entre toda la luz natural que sea posible. Para ello, coloca unos visillos o cortinas poco tupidas con el fin de que la luz sea tamizada por los tejidos pero que no tenga problemas para atravesarlos. Además, para conseguir un efecto multiplicador de la luz procura que la decoración incluya colores claros tanto en los tejidos como en el mobiliario. No es necesario que cambies los muebles, pero sí puedes sustituir las fundas de los cojines por otras más claras o incluir algún toquecito con adornos decorativos.
Personaliza cada habitación
Tu casa no es un hotel impersonal o un hospital sin personalidad. Deja que tus gustos y aficiones se evidencien. Imprime las fotos de tus últimos viajes o de los mejores momentos con la familia o amigos y salpica con ellas las paredes del salón, del distribuidor o de la estantería del comedor. Tener a la vista algunas de las experiencias más agradables del pasado levanta el ánimo, fortalece la autoestima y da seguridad.
¡Viva el color!
Está demostrado que los colores influyen en nuestro estado de ánimo: el azul relaja, el amarillo ayuda a la concentración, el rojo estimula, el verde calma y el naranja nos ayuda a cargar las pilas. La cromoterapia estudia cómo nos afectan los colores, tanto en los aspectos físicos como en los psíquicos y emocionales. Y, aunque no es una ciencia exacta, lo cierto es que no se puede negar la existencia de resultados concluyentes en numerosos estudios.
¿Significa esto que debemos convertir nuestro hogar en un arco iris? Ni mucho menos. Pero sí, tenerlo en cuenta y elegir algunos de esos colores en función del uso de cada habitación. Por ejemplo, para una sala de juegos infantil o juvenil puedes escoger naranjas y amarillos que contribuirán a nivelar la energía. No parece muy adecuado elegir tonos pastel de azul o verde con los que conseguirás calma y tranquilidad, los cuales encajan mejor en un dormitorio de matrimonio, ya que invitan al descanso.
Adapta tu casa a cada estación
Quizá sea excesivo cambiar la decoración cada tres meses. Entre otras razones, porque la mayoría no tenemos tiempo para ello. Pero sí te aconsejamos hacer algunos cambios en verano y en invierno. Es importante hacer de tu casa un lugar cálido y acogedor durante los meses más fríos, del mismo modo que cuando llega el verano, nos sentiremos mejor si incluimos algunos detalles para hacer que tu hogar sea más fresco y luminoso. Si estos días estás de vacaciones y tienes algo de tiempo para poder dedicárselo a tu casa, ¿qué te parece si te pones manos a la obra, iluminas tu hogar, colocas algunas fotos y bañas de color el salón? Verás cómo te sienta de maravilla.
¿Crees que la decoración influye en el estado de ánimo? ¿Qué te han parecido estas ideas? Comparte tu opinión con nosotros.