
Barrio del Raval en Barcelona
Muchos los califican de barrios bohemios. Y es que, realmente ésa es la estética de muchos espacios urbanos que se han visto afectados por la gentrificación. Sin embargo, detrás de esa apariencia, hay todo un fenómeno que se ha bautizado con el término gentrificación. Pero, ¿cuál es el significado de este vocablo nada “bohemio”? La situación que describe es sencilla, aunque sus consecuencias, no lo son tanto. ¿Quieres saber en qué consiste? En este post lo explicamos.
Vecinos desplazados
La gentrificación es un proceso que se produce con bastante frecuencia y que consiste en que la población de un barrio empobrecido se ve desplazada por nuevos vecinos con un nivel de ingresos más elevado. Estos nuevos habitantes empiezan a renovar el entorno y en pocos meses, las tiendas de barrio de toda la vida se convierten en boutiques de alto nivel, el restaurante modesto de menú pasa a ser de diseño y exclusivo, etc. Un cambio, que sólo se pueden permitir los nuevos residentes. Así que, los antiguos, en la medida que pueden, poco a poco, van abandonando su barrio.
Barrios recuperados, pero prohibitivos
En el proceso de gentrificación existen aspectos realmente complejos, como por ejemplo, el hecho de que durante el mismo, se produzcan dos hechos contrarios de forma simultánea. Es decir, por un lado, se emprenden mejoras evidentes en los barrios afectados, los cuales, la mayoría de las veces, presentaban carencias importantes, además de instalaciones en mal estado; y por otro, eleva el nivel de vida del barrio hasta tal punto que sus habitantes anteriores no pueden costearse los gastos de vivir en ese barrio.
El caso de Barcelona
La gentrificación es un fenómeno que se da en muchas de las principales ciudades de nuestro país. Especialmente, en Madrid y Barcelona. En el caso de la ciudad condal, algunos expertos apunta al turismo como el responsable de los devastadores efectos vividos en muchos barrios y rincones de la capital catalana.
Un claro ejemplo lo encontramos en dos de los barrios de Barcelona, el de la Barceloneta y el del Born, en los que entre 2000 y 2007 (datos de la tasadora Tinsa), el coste de comprar una casa aumentó un 262%. En ese mismo periodo las viviendas en Barcelona capital subieron el 185%.
Recuperar un barrio sin acabar con él
A pesar de los efectos negativos del fenómeno, hay quien ve en la gentrificación una posible solución para aquellos barrios que han entrado en un estado de empobrecimiento del que parece difícil salir. Sin embargo, en sentido contrario también se alzan voces que apelan a otras soluciones, como por ejemplo, la arquitectura, como forma de transformar la ciudad, y estos barrios, en particular, con el fin de enriquecerlos sin necesidad de arrasar llevándose por delante al vecindario.
¿Vives en un barrio afectado por la gentrificación? ¿Crees que este fenómeno es positivo o negativo? Danos tu opinión en este post.
Foto: BIT Comunicación