La principal ventaja de contar con los servicios de un agente inmobiliario es que no tienes que preocuparte de nada, porqué él o ella se encargarán de que el proceso de compraventa vaya bien, de que todo sea correcto y se cierre lo más rápido posible. Algo que le viene bien tanto al comprador como al vendedor. Pero a veces algún trámite se puede estancar o pueden surgir contratiempos durante el cierre de la compraventa. Es en estos casos cuando un API tiene que demostrar que es eficaz y resolutivo. ¡Te damos algunos consejos para cerrar una compraventa con éxito!
Tener toda la información
Un API debe ir reuniendo toda la documentación e información necesaria para la compraventa a lo largo de la gestión y revisarla para evitar sorpresas, como por ejemplo, comprobar que ese piso en Barcelona en venta no tiene cargas. Un API también debe estar al día de todas las leyes y normativas relacionadas con la vivienda y los cambios o modificaciones que éstas puedan sufrir: la cédula de habitabilidad, la Inspección Técnica de Edificios, el Certificado de Eficiencia Energética, etc.
Ir sin pausa pero sin prisas
Que “las prisas no son buenas” o que “lo que deprisa se hace, despacio se llora” son dichos que contienen una gran verdad: ir demasiado rápido te puede hacer cometer errores. Por eso, un API eficaz debe ser ágil pero muy atento y cuidadoso cuando revisa toda la documentación. Del mismo modo, debe supervisar todos los pasos que se han dado en el proceso de compraventa tantas veces como sea necesario para asegurarse de que todo es correcto.
Tener a todas las partes en mente
En la compraventa de una vivienda, tan importante es el comprador como el vendedor, pues la gestión no puede llegar a buen puerto el uno sin el otro. Para un API es importante que ambas partes queden satisfechas con sus servicios y sientan que se tienen en cuenta sus necesidades. Por eso, debe establecer una línea abierta y fluida de comunicación con el comprador y el vendedor, aunque quién le haya proporcionado la vivienda para su cartera de clientes sea el vendedor.
Controlar que se entienden todos los aspectos legales
No basta solo con tener toda la documentación a punto para la última firma y haberla revisado un par de veces. También hay que procurar que todos los aspectos legales que conciernen a la compraventa estén claros, resueltos y comprendidos por todas las partes involucradas. Un API tiene que tener la capacidad de explicarles de forma clara y concisa los términos legales de la compraventa de una vivienda.
Proporcionar claridad acerca de los pagos y los plazos
Todas las partes involucradas deben tener muy claro quién paga qué, de qué forma lo va a pagar y en qué plazos establecidos. Del mismo modo, debe haber total acuerdo y transparencia respecto a los honorarios del agente desde el principio.
Foto: BIT Comunicació