Sólo queda una semana para que acabe agosto y, en un abrir y cerrar de ojos, llegará el otoño. De cara a los próximos meses, muchas familias se plantean formar parte de un programa de intercambio de estudiantes y aprovechar la habitación vacía que les queda de su piso de Badalona. En Api.cat te damos las directrices básicas para que sepas qué hacer en el caso de que te interese.
Requisitos personales y de vivienda
En primer lugar, debéis buscar y contactar con una de las entidades que se dedican a organizar programas de intercambio de estudiantes. Una vez localizadas las que más interesantes os parezcan, sus responsables se pondrán en contacto con vosotros para haceros una entrevista personal y una visita a vuestra vivienda para comprobar que reúne los requisitos mínimos necesarios para que se aloje el estudiante extranjero y conocer el ambiente de vuestro piso de Lleida.
Normalmente, este tipo de intercambios tienen una duración que puede oscilar entre una semana y tres meses, y los estudiantes que los realizan tienen entre 15 y 18 años. Ellos también pasan por una entrevista personal, e incluso, en ocasiones, asisten a pequeños cursos preparatorios para esta experiencia. Además, se les suele exigir un nivel de español medio-alto, de modo que la comunicación y la convivencia resulte lo más fluida posible.
En cuanto a los requisitos que ha de tener tu vivienda, normalmente se circunscriben a: una habitación propia para dormir y estudiar, acceso a Internet y llaves de la vivienda. Si tuviera que compartir habitación, debería ser con una persona de su mismo sexo y con una edad similar.
Lo ideal es que preparéis su cuarto de modo que se sienta cómodo y que al mismo tiempo la decoración invite al estudio. No olvidéis que ha venido a España a perfeccionar un idioma y sus padres quieren que aproveche al máximo el tiempo que estará en vuestra casa, así como, la inversión económica que han realizado para ello.
Costes de un programa de intercambio
Los gastos que puede suponer a una familia tener a un estudiante de intercambio se limitan a su manutención. El resto de costes, es decir, los relacionados con el transporte, las clases, las actividades extraescolares, etc., correrán por cuenta del estudiante o la agencia que organiza la estancia.
Por supuesto, la familia acogedora no tiene ninguna responsabilidad legal sobre el estudiante. Simplemente, debería facilitarle su integración en el entorno en el que vivirá esos días. Para ello, sería bueno que pasara tiempo con él, que le presentara a amigos y familia, así como a los vecinos.
¿Alguna vez has alojado a un estudiante extranjero? ¿Cómo fue la experiencia? Nos encantaría saber cómo os fue.
Foto: Pinterest
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