El ascensor es un valor añadido en cualquier edificio de viviendas. Y al ser un valor añadido, influye en la tasación de la vivienda. Te contamos a qué nivel en las noticias inmobiliarias de Api.cat
Aquellas personas que utilizan el ascensor cada día, quizás lo ven algo tan cuotidiano, que dan por supuesta su existencia. Pero, en España, hay miles de edificios sin ascensor que obligan a sus habitantes a hacer un poco de ejercicio, además de ver cómo sus viviendas valen algo menos cuando las quieren vender.
El ascensor aumenta el valor de la vivienda
Por lo general, los pisos con ascensor tienen un precio por metro cuadrado más elevado que los pisos que no tienen ascensor. Según un análisis de Urban Data Analytics, empresa especialista en tratamiento de Big Data enfocado al sector inmobiliario, las viviendas cuyo edificio no dispone de ascensor pueden valer hasta un 40% menos. Aunque en ese porcentaje también influyen otros factores como la zona y las características de la vivienda.
Por ejemplo, en Madrid, los precios por metro cuadrado varían desde una media de 1.334 euros/m2 para los pisos que no tienen ascensor, hasta los 1.879 euros para los que sí tienen ascensor.
En la infografía del análisis elaborada para el caso de Madrid, se ve en qué barrios de la capital la existencia del ascensor devalúa o revaloriza más la vivienda.
Una cuestión de accesibilidad
Tener ascensor es un valor añadido, pero no hay que enfocarlo como un lujo, si no como una cuestión de accesibilidad en los edificios. Como en las viviendas de nueva construcción eso ya está contemplado, hay que fijarse en los barrios donde las viviendas son más antiguas y la rehabilitación es un tema pendiente. Solo así se puede entender y analizar la disparidad de precios que hay entre las viviendas con o sin ascensor. En resumen, que entran en juego otras variables como la antigüedad de la vivienda y su ubicación.
Para hacerse una idea del estado de la cuestión: Según el Censo de Población y Viviendas del INE correspondiente al año 2011, el 22,9% de los edificios eran accesibles, y el 6,3% disponían de ascensor, frente al 21,1% y 4,8% respectivamente del censo del 2001.
Es decir, que las nuevas normativas han favorecido el incremento de instalación de ascensores y mejoras en accesibilidad. No obstante, se evidencia que para los edificios que no tienen ascensor, instalarlo sigue siendo un problema que enfrenta a los vecinos, ya que requiere una importante inversión por parte de la comunidad. A pesar de esto, y como bien señala el estudio, hay que tener en cuenta que las inversiones en accesibilidad son determinantes para la revalorización de un inmueble.
Visto en: Urban Data Analytics