
Pisos a la venta
Recientemente conocimos el dato ofrecido por el Anuario Estadístico del Mercado Inmobiliario Español que cifraba en 1,6 millones el número de viviendas sin vender en nuestro país. En las noticias inmobiliarias de Api.cat nos hicimos eco de ello y, en esta ocasión, queremos profundizar en el tema tratando de dibujar algunas posibles líneas de actuación capaces de reducir semejante lastre.
¿Qué nos ha traído hasta aquí?
La formación de este “atasco” en la venta inmobiliaria responde a “muchas y muy variadas razones”, afirma Joan Ollé Bertrán, Presidente del colectivo API en Cataluña, quien señala, entre otros, los siguientes motivos:
- Fijación de un precio inadecuado.
- Pésima ubicación de los inmuebles.
- Mala comercialización de las promociones.
- Error en el diseño del producto, dada la falta de demanda en esa tipología.
- Acabados por debajo de los niveles mínimos exigibles.
Además, si a estas acciones situadas en el marco estrictamente inmobiliario, le añadimos la incapacidad adquisitiva para comprar una vivienda de una gran parte de la población, causada en parte por la alta tasa de paro que empeora la situación, así como las exigencias para conceder hipotecas de los bancos, el resultado no podía ser otro que el que estamos padeciendo.
¿Cómo acabar con los pisos invendibles?
Aunque no tenemos la solución mágica que resuelva esta situación, lo que sí podemos hacer es examinarla, tal y como sugiere Ollé: “El agente inmobiliario debería emplear toda su experiencia para analizar en profundidad el panorama en el estamos trabajando y a partir de ahí, intentar establecer las causas que hay detrás”. Y añade: “cuando el agente inmobiliario las conozca estará en disposición de aplicar el remedio más adecuado en cada caso. Es decir, podrá escoger el remedio en función de si el problema es el precio, la ubicación, los acabados…”
Por tanto, parece que antes de actuar es imprescindible detenerse a examinar sobre el terreno con el fin de determinar la solución más específica. Solución que podría ser “más o menos agresiva, llegando incluso a tener que cambiar el uso del inmueble, de residencial a secundario, de vivienda habitual a turística, de grandes superficies a pequeñas y viceversa, o valorar la posibilidad de tomar la decisión de derruir lo construido”, explica Ollé.
En manos profesionales
En el caso de que tu piso de Barcelona sea uno de esos inmuebles difíciles de vender, Joan Ollé sugiere “ponerse en manos buenos agentes inmobiliarios y actuar siguiendo sus consejos. Lo peor es no hacer nada, ya que, al final, la pérdida es peor.”
¿Eres propietario de uno de esos pisos invendibles? ¿Crees ser irá resolviendo esta situación? Danos tu opinión. Nos encantaría conocerla.
Foto: BIT Comunicación