Has gastado tiempo y dinero en reformar y amueblar tu piso de Girona. ¡Y ya estás listo para vivir en él! Ahora, toca conservarlo. Una de las opciones que tienes es contratar un seguro para tu hogar. Antes de ello, comprueba que tu comunidad de propietarios no disponga de un seguro para todo el edificio. Sin embargo, en los aspectos que más puedes ahorrar son en los extras de tu vivienda. En Api.cat, te enumeramos ocho de los que más influyen:
1. Coberturas prescindibles. En algunas pólizas de seguros del hogar, se ofrecen servicios como la protección de los ordenadores o la responsabilidad civil de las mascotas que incrementan el precio de la prima sin que a veces sea necesario. Si no tienes ni una cosa ni la otra, no hace falta que te beneficies de estas cláusulas.
2. La ubicación y las características de la casa. Si tu vivienda se encuentra en una zona con un índice alto de robos, la prima del seguro de hogar se encarecerá. Si en tu casa de Sabadell te has puesto una piscina con trampolín, has de saber que el riesgo es de lesiones es mayor, por lo que pagarás más. Igual que si tienes un perro, considerado como de raza peligrosa, o tu inmueble se encuentra en un área con posibilidades de sufrir inundaciones o terremotos, tu seguro tendrá una prima más elevada.
3. Antigüedad de la vivienda. Si al final has cumplido tu sueño y has remodelado un inmueble de principios de siglo y ahora vives en él, también debes tener en cuenta que el valor de la prima será superior. En este caso, los techos, las paredes y las vigas tienen más números de padecer desperfectos.
4. Materiales de construcción. Si los materiales utilizados para construir tu vivienda son caros y sofisticados, el coste de reparación del inmueble en caso de siniestro será más alto. Así, la prima mensual que abonas de tu seguro de hogar también se encarecerá.
5. Tipo de uso. El uso de la vivienda (habitual, alquiler o local comercial) determina la responsabilidad de la persona que contrata la póliza. Las empresas aseguradoras te los solicitarán para calcular el importe de la prima que debes pagar.
6. Número de personas que viven. En los últimos años, las pólizas de seguros de hogar cubren al asegurado y los daños personales y materiales que ocasionen a terceros las personas que convivan o dependan de él. Estas coberturas ampliadas, aunque necesarias, encarecen el seguro.
7. El sistema de calefacción. Si utilizas una chimenea para calentar tu piso durante los meses de invierno, debes ser consciente que pagarás más seguro. Las estadísticas concluyen que la mayoría de incendios en viviendas se producen en hogares con chimenea. La misma situación se produce en los inmuebles con una instalación eléctrica antigua.
8. Asegurar la vivienda por un precio superior al que vale. Si tu casa está tasada en 150.000 euros, no intentes asegurarla por más, ya que en caso de siniestro, la compañía de seguros te abonará el valor que conste en la póliza. De esta forma, te evitarás pagar más mensualmente porque el seguro solo responderá por el valor real del piso.
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1 comment
En definitiva:
No tengas ordenador ni mascota y, si los tienes, despréndete de ellos.
Si en tu zona hay demasiados robos, establece una policía de barrio.
No te des el gusto de tener piscina y, si tu amigo fiel es de una raza “peligrosa”, deshazte de el.
Renuncia a tu sueño de comprar una vivienda de principios de siglo (pasado).
Renuncia también a la agradable sensación de un bonito baño, cocina y demás elementos y servicios de tu casa, salvo que sean un “triple b”.
Echa de tu casa a tus hijos y a tus ancianos padres (y no te olvides de tu pareja).
Si tienes una acogedora chimenea, derríbala.
No creo que seas más feliz, ni que ahorres dinero con todo ello pero, eso sí,………………….bajarás la prima del seguro.