El estallido de la burbuja inmobiliaria ha significado un antes y un después para el sector. La caída de los precios, de la compra de viviendas o las dificultades para acceder al crédito hipotecario, entre otros, hicieron que muchas agencias inmobiliarias pasaran de tener muchísimo trabajo a tener que salir a la ‘búsqueda y captura’ de clientes para poder mantenerse.
Ante este panorama, y como en cualquier sector, es normal que los agentes inmobiliarios pasen por períodos de desmotivación profesional, al ver que por mucho que se esfuercen, ahora cerrar una operación es mucho más difícil y menos rentable.
Tener a tu equipo motivado es imprescindible para que los resultados sean positivos, pues está demostrado que un empleado motivado es el mejor activo para la empresa. Hoy en api.cat hablamos de estrategias para motivar al personal.
1. El dinero importa, pero tampoco lo es todo.
Es un clásico de determinados sectores profesionales intentar motivar al trabajador mediante aumentos salariales por méritos o comisiones en función de las ventas. Es correcto y es importante, pues todo el mundo trabaja por dinero. Pero si no hay un aliciente más allá de lo económico, si el ambiente laboral es hostil o no acompaña, solo funcionará durante un tiempo.
2. Flexibilidad en el horario.
Este punto es especialmente crítico en países como España, donde se valora más la contabilización de las horas laborales que la productividad real del trabajo de una persona. En otros países, como por ejemplo Alemania, es habitual que las empresas den cierta libertad a sus empleados para que flexibilicen sus horarios según su carga de trabajo y necesidades personales.
Un empleado que sienta que confías en él, en su rendimiento laboral y que además puede conciliar su vida profesional con su vida personal, es un empleado fidelizado que dará lo mejor de sí mismo para corresponder ese trato humano por parte de la empresa.
3. Reconocimiento social.
A todo el mundo le gusta que le reconozcan sus méritos y es algo tan sencillo y tan básico que muchos directores lo olvidan. Sin embargo, es una de las principales fuentes de desmotivación: “me he matado a trabajar para que esta venta salga adelante, y ni si quiera me han dado las gracias”. Es un error creer que por el hecho de que a una persona se le paga por hacer un trabajo, no se le deba felicitar por sus logros, por pequeños que sean. ¡Ponlo en práctica y verás cuántas sonrisas arrancas!
4. Expectativas de futuro.
No sentirse estancado es otro elemento importante para mantener la motivación de tus agentes inmobiliarios. Incentivarlos con proyectos a largo plazo o proponer una progresión dentro de la empresa es una buena forma hacerles saber que la empresa cuenta con ellos y su trabajo y que, si lo hacen bien, pueden escalar posiciones.
5. Realizar actividades de coaching o team building.
Una vez al año, por ejemplo, no está de más que la empresa organice actividades de ocio para sus empleados para fomentar relaciones interpersonales positivas.
Un día de deportes de aventura en plena naturaleza viendo al jefe haciendo el mismo ridículo que tú hace que se rompan ciertas barreras de formalidad y que por unas horas, todos vean a la persona que hay detrás del trabajador. Si salir a la aventura no es lo vuestro, siempre se puede citar a un coach profesional para que haga dinámicas de empresa en la misma oficina.
¿Qué te parecen estas ideas? ¿Has puesto alguna en práctica? ¡Cuéntanoslo!
Foto 1: Pinterest
Foto 2: Pinterest