Hay personas a quién no les acaba de encajar el régimen de alquiler, pero tampoco pueden comprar, porque no tienen los suficientes ahorros para una entrada. Otras, quizás no tienen claro si quieren seguir viviendo de alquiler o dar el paso y convertirse en propietarios… Para todos ellos hay una opción intermedia. Entérate de qué es el alquiler con opción a compra, así como de sus ventajas e inconvenientes en las noticias inmobiliarias de Api.cat
Un alquiler con opción a compra es un tipo contrato entre particulares en el que, el inquilino entra a vivir en régimen de alquiler, pero pasado un determinado período de tiempo, que suele ser de 3 años, debe decidir si compra la vivienda arrendada o no. Si lo hace, las mensualidades que ha ido pagando como renta, se restarían del precio total de la vivienda, facilitándole la compra.
Parece una buena fórmula, ¿verdad? No obstante, como todo, tiene sus ventajas e inconvenientes. Juan José Aguilera, director comercial del colectivo API, nos cuenta cuáles son.
Ventajas del alquiler con opción a compra
- Fomenta que el inquilino/comprador gane tiempo para ahorrar mientras disfruta de la vivienda, ya que la renta mensual que se paga durante el alquiler se resta del precio total de la venta. Por lo tanto no es un ‘dinero perdido’ si no que, de algún modo, es como empezar a pagar la hipoteca sin el compromiso que conlleva la misma. Al menos, durante un tiempo.
- A los propietarios que les cuesta vender esa vivienda o que quieren asegurarse unos ingresos mientras no se vende, el alquiler con opción a compra les permite dar salida al inmueble y obtener una rentabilidad, sin renunciar a la venta.
Además, tal y como señala Juan José Aguilera:
“El precio de compraventa se pacta en el momento de formalizar el contrato de alquiler con opción a compra. Por lo tanto, al inquilino no le afecta si el mercado sube, porque pagará la cantidad que se acordó en su momento.”
Inconvenientes del alquiler con opción a compra
- No obstante, Aguilera nos recuerda que no todo son ventajas para el inquilino: “Para hacer un alquiler con opción a compra, el inquilino debe pagar un canon, que es una especie de depósito, que es lo que le otorga el derecho a tener la opción de comprar. Si acaba comprando, el canon también se imputa al precio total de la compraventa. Pero si finalmente no compra, se pierde. Es una garantía que tiene el propietario que en realidad quiere vender, para esquivar inquilinos que solo pretendan arrendar y le hagan perder el tiempo.”
- Para el propietario, el hecho de que el precio de venta se acuerde previamente, puede ser un inconveniente, ya que, si sube el mercado a su favor, luego no podría actualizar el precio de venta según el mercado.
- Por último, Aguilera señala que: “Si el inquilino decide no comprar, incluso antes de finalizar el período de alquiler, el propietario no podrá venderle la vivienda a otra persona mientras el contrato esté en vigor. Sí que se puede vender con el inquilino, pero ya es más complicado encontrar a un comprador que acepte respetar el contrato de arrendamiento vigente.”