Facebook, Twitter, Youtube, Flickr, Pinterest… Seguro que has oído hablar de las redes sociales. Forman parte del entorno 2.0 y de la sociedad de la comunicación en la que vivimos. Se han convertido en herramientas de marketing indispensables para el usuario particular y para las empresas. Por eso, queremos presentarte una pequeña guía que te pueda servir como curso para agentes inmobiliarios en las redes sociales.
En una red social, se debe promover la marca. Pero además, también puedes publicar información de un inmueble segmentada por públicos y dirigida a un segmento de población concreto. Más que para vender un piso en Cerdanyola del Vallès, las redes sociales te sirven para dar a conocer tus servicios para comercializar la vivienda. Simplemente, genera tu marca personal.
¿En Twitter puedo vender mi piso?
La respuesta es por supuesto. Posiblemente no cierres la operación a través de la red social, pero te ayudará a visibilizar la oferta, posicionarla en la web y mejorar la estrategia de marketing. Estas plataformas han cambiado la forma de relación entre empresas y clientes. Ahora, el agente inmobiliario no ofrece y el comprador se interesa, sino que el interesado comparte, opina, critica, pregunta…
Facebook y Twitter
Aunque existen centenares de redes sociales, nos centraremos en Facebook y Twitter. Os dejaremos algunas características de cada una:
Facebook es la red social más extendida. Al agente inmobiliario le permite: crear una comunidad de amigos a los que les puedes llevar a la web, construir un grupo personalizado (pisos en Sabadell), en el que incluyas a compradores interesados en esa ciudad, publicar eventos y practicar el networking, una actividad tan propia del agente inmobiliario.
Twitter tiene la dificultad de que hay que expresarlo todo en menos de 140 carácteres. Pero resulta ideal para construir comunidades de usuarios. Para un agente inmobiliario, suena ideal crear una comunidad de profesionales que venden o alquilan pisos o viviendas en una zona determinada. Así se fomenta la participación, la interacción y la colaboración.
¿Por donde empiezo?
Aunque se trate de la realidad virtual, no es tan diferente a la vida cotidiana. Antes de nada, créate una marca que te identifique y diferencie, personaliza tu perfil con enlaces, fotografías y vídeos, interactúa con otros usuarios, comenta, comparte, debate, responde, sugiere… En el fondo, debes hacer como en tu vida real: escucha activamente a los clientes, respeta a tus competidores, sé honesto con tus usuarios y márcate unos objetivos de constancia.
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