Reformar la vivienda es una buena alternativa para aquellos que necesitan renovar el interior de su casa pero no quieren comprar, ya sea porque la suya es de propiedad y la quieren preservar o porque no quieren atarse a una hipoteca.
Hoy existen materiales y técnicas que permiten reformar una casa de arriba a abajo con una inversión menor a lo que te costaría una casa nueva. Sin embargo, cabe hacer un ejercicio de reflexión previo y decidir qué quieres lograr exactamente con la reforma, ¿un simple lavado de cara o una reforma de mayor valor con materiales de mayor calidad? Según tu respuesta, el presupuesto puede variar substancialmente.
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1. Presente y futuro
Ya que vas a invertir un dinero en la reforma de tu casa en Mataró, y te vas e embarcar en unas obras que pueden durar varias semanas, ¡no seas corto de miras! Diseña la reforma según tus necesidades actuales pero proyectando lo que crees que podrías necesitar en un futuro, por ejemplo, una habitación versátil por si crece la familia o un baño adaptado para cuando seas mayor.
No olvides hacer mejoras en la eficiencia energética de tu casa, ¡es una inversión que merece la pena!
2. Cambia tu mirada y empieza una lista
Puede que te resulte difícil pero tienes que cambiar el chip y ser capaz de ver tu casa con una nueva distribución del espacio, ya que según la reforma que hagas, podrías incluso tirar abajo alguna pared para ampliar alguna estancia o al contrario, añadir una más. Te recomendamos que te tomes con mucha calma esta parte del proceso, pues es decisiva.
Mira varias revistas de interiores y de diseño para coger ideas o incluso dedica algunas horas a recorrer los grandes establecimientos del bricolaje para ver materiales y sus posibles aplicaciones. Una vez tengas claro lo que necesitas, coge papel y bolígrafo y empieza a hacer una lista de todos los cambios que quieres llevar a cabo.
3. Busca profesionales con referencias
A la hora de contratar a los albañiles y demás técnicos, no olvides que, a veces, lo barato sale caro. Si contratas a un “chapuzas” que trabaja sin estar regularizado y te hace un estropicio, podría costarte el doble y quedarte sin nadie a quién reclamar. Hay muchas empresas fiables y sólidas que cumplen con sus obligaciones legales que te aportarán seguridad. Recuerda pedir todas tus facturas para, según el caso, deducirte el IVA por las obras, solicitar posibles ayudas públicas y, sobretodo, reclamar en caso de necesidad.
4. Pide al menos 3 presupuestos sin compromiso
Es recomendable pedir, al menos, tres presupuestos diferentes para poder comparar. Pide también, que estén detallados por partidas (albañilería, electricidad, fontanería…) y que especifiquen la calidad de los materiales a utilizar. Así podrás compararlos punto por punto y negociar la rebaja de algún apartado concreto.
5. Establece una fecha de finalización
No sería la primera vez que una obras se alargan más de lo deseado, generando gastos adicionales que no tenías previstos. Para evitarlo, establece por contrato con la empresa que hará la reforma de tu casa en Tarragona una fecha de finalización y en caso de sobrepasarla, de qué manera te lo compensarán.
6. Avisa a los vecinos
Ponte en su lugar… vas a causar ruido y molestias durante unos días o incluso semanas. Avísales de los plazos y respeta los horarios de descanso. Piensa que según la envergadura de las obras, necesitarás incluso el premiso de la Comunidad.
7. Asegúrate de si necesitas una licencia
Recuerda que hay reformas para las que se debe pedir una licencia de obra mayor. Son las obras que afectan a la estructura del inmueble, la fachada o a los elementos comunes… Infórmate bien y sigue la normativa, antes de que un vecino enfadado por el ruido te denuncie.
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